Reserva Ecológica Ojos Indígenas: una vista al pasado

Ubicada en el distrito de San Cristóbal, la Reserva Ecológica Ojo Indígenas es uno de los rincones más auténticos de República Dominicana, con una belleza natural extraordinaria ideal para familias y amantes del ecoturismo. Si quieres desconectar de verdad, toma la mochila y prepárate para conocer uno de los mayores secretos de Punta Cana.

Esta reserva fue creada en 1987, cuando se cedió todo el territorio a la Fundación Ecológica Puntacana. Su objetivo es proteger y conservar la biodiversidad, así como la investigación científica y el desarrollo sostenible de la región. Aunque está abierta al turismo, el acceso está restringido para preservar la belleza natural del entorno.

En su interior se pueden encontrar una gran variedad de ecosistemas, como bosques de montaña, lagunas y humedales. La flora está compuesta por más de 500 especies, de las que un tercio son plantas endémicas de República Dominicana, incluyendo plantas medicinales. En cuanto a la fauna, en la reserva habitan jaguares, pumas, zorros rojos, ciervos de cola blanca, iguanas e hicoteas (tortugas de agua dulce), además de aves, otros reptiles y anfibios. Algunos de estos animales están en peligro de extinción, otro de los motivos por los que se creó el parque y se conserva intacto.

La belleza del lugar lo convierte en un espectáculo natural que ofrece una experiencia inolvidable. Una atracción turística en la que puedes encontrar rutas de senderismo, observación de aves, paseos en barca por alguna de las lagunas y una granja. También hay un centro de interpretación donde se puede aprender más acerca de la vegetación y fauna que habita la reserva, así como el legado cultural de los primeros habitantes de esta zona.

El nombre de Reserva Ecológica Ojos Indígenas no se puso al azar. Existen pruebas de que los primeros habitantes de República Dominicana estuvieron en esta zona, y en su interior hay 12 lagunas (ojos) que se han formado a medida que el río Yauya ha horadado el terreno y surte de agua estas zonas, en las que se puede disfrutar de un baño relajante al sol del Caribe.

La huella del pueblo Taíno se conserva también en el nombre de las lagunas, pues la mayoría de estas se han denominado empleando palabras de su lengua, con el objetivo de preservar la memoria de los primeros habitantes de este sitio.

La reserva es perfecta para practicar senderismo, caminando por unos 3 kilómetros de bosque tropical y sentir la sensación de que aún queda algo del legado que dejaron los indígenas a su paso.

Además de visitar las lagunas y las diferentes áreas para observar la fauna y vegetación de este paraíso, el centro de interpretación es otro de los atractivos de la reserva. En él se puede aprender acerca del legado indígena, de la biodiversidad y de prácticas sostenibles en sectores como la agricultura o la apicultura ecológica.

Si estás organizando tus excursiones y quieres incluir una visita a esta espectacular reserva, el horario de apertura es desde las 8:30 hasta las 17:00 horas, aunque solo se permite la entrada hasta las 16:30 horas.

La entrada a la reserva ecológica está abierta a todos los visitantes, tanto los que se alojan en los hoteles que hay junto a ella, como a quienes piensan visitarla desde cualquier lugar de Punta Cana. Eso sí, los precios de las entradas varían en función de si la persona está alojada en el hotel o lo visita desde fuera.

Además, conviene recordar que al tratarse de un espacio protegido, el acceso está limitado con el fin de preservar la biodiversidad y el ecosistema. Por tanto, hay que asegurarse de que podrás visitar el parque el día que quieres, y reservar con antelación si es posible para que no tengas problemas al entrar.

Para disfrutar al máximo de la aventura, es importante que tengas en cuenta algunas recomendaciones prácticas:

• Asegúrate de cuáles son las normas existentes en la reserva, como las zonas en las que está prohibido acceder, las pautas para observación de fauna, no dejar ningún residuo por el camino y seguir las rutas establecidas.
• Lleva ropa y zapatillas adecuadas para ir lo más cómodo posible. Si planeas bañarte o realizar alguna actividad acuática, no olvides llevar calzado que se pueda mojar, ropa de baño y toalla.
• Ten cuidado con el sol. Al estar en una zona tropical, la reserva está en una zona expuesta a la radiación fuerte. Asegúrate de llevar un gorro para cubrirte la cabeza y protector solar para proteger tu piel de los rayos ultravioleta.
• Lleva comida y agua. Ten en cuenta que la reserva no cuenta con establecimientos para comer o comprar bebidas, de modo que necesitas llevar tus provisiones para hidratarte y reponer fuerzas. Asegúrate de llevarlo en envases y bolsas biodegradables, y no dejar nada tirado por el suelo. Conservar el ecosistema es fundamental.
• Cuidado con los insectos. Como es lógico, buena parte de la fauna de esta reserva son insectos, y algunos de ellos pueden causarte molestias. Para evitarlo, lleva repelente y aplícalo de forma adecuada.
• Ten un papel activo en la conservación de la reserva. Haz todo lo posible por colaborar en la protección de la biodiversidad, siguiendo las normas y cuidando el entorno.

La reserva ecológica está a apenas 10 minutos del centro de Punta Cana, bajando por Boulevard del Mar hasta llegar a la zona. Si vas desde Cap Cana puedes ir caminando, pero es un camino complicado. En el mapa que tienes aquí debajo puedes ver la ubicación de la reserva y la localización desde varios puntos.

Con nuestro servicio de transporte podrás acercarte y disfrutar de las maravillosas vistas y el encanto de esta reserva, ideal para familias, amantes de la fotografía de naturaleza y aficionados al ecoturismo en general.