La República Dominicana cuenta con una naturaleza única. Y es que, más allá de lugares increíbles como Punta Cana o La Romana, existen pequeños enclaves en medio de la selva que merece la pena visitar.
Uno de estos paisajes vírgenes es los saltos de Jima. Se trata de un espectáculo natural de 12 saltos de agua a los que el turismo de masas todavía no ha llegado. Hoy queremos que conozcas todo sobre ellos y, porque no, que los admires en tu próxima visita a la República Dominicana.
El río Jima es el encargado de dar nombre a los saltos de agua. Se trata de un cauce que nace en la provincia de Monseñor Nouel, cerca de la reserva científica Las Neblinas, y que recorre la orografía dominicana hasta desembocar en el río Camú. Lo más curioso es que las aguas de este río terminan definitivamente en la bahía de Samaná, dónde acuden muchos turistas para disfrutar de la excursión de avistamiento de ballenas jorobadas.
La gracia de esta parte del río Jima es que se encuentra con los barrancos y montañas al norte de Bonao, en donde el chorro de agua forma altas cascadas.
En medio del bosque tropical, encontramos hasta 12 saltos de agua, algunos que llegan hasta los 7 metros de altura.
Estos saltos fueron denominados Monumento Natural por parte del gobierno dominicano en el año 2009, lo que atrajo a algunos turistas a la zona. Aunque los saltos de Jima han ganado popularidad con el paso de los años, sigue siendo una actividad de ecoturismo en la que podremos sentirnos en paz y tranquilidad por la poca afluencia de gente.
El motivo de la declaración fue dar relevancia a esta zona acuífera, una de las más importantes de la región de Monseñor Nouel.
Aunque te hemos contado que hay un total de 12 cascadas, solo podemos acceder a dos de ellas: el Salto I y el Salto II. Pero no te preocupes, porque son las más espectaculares.
Como ya te comentamos, los saltos de Jima están considerados Monumento Natural. Gracias a esto, se ha logrado conservar un lugar magnífico. Pero esto no solo significa que podamos admirarlo, sino que también nos podemos bañar en sus balnearios naturales.
Estos balnearios son charcas con agua cristalina que tienen como fondo las dos cataratas que se pueden visitar. El baño se da en un entorno natural único, rodeados de una biodiversidad que incluye lo mejor de la flora dominicana.
Altos árboles nos custodian mientras nos adentramos en las piscinas naturales que forman las cascadas. Entre las variedades que podremos encontrar se dan los higos, ceibas, helechos, ciguas y mucho más.
Más allá de la vegetación, los saltos de Jima también son Monumento Natural por su fauna. Los inquilinos más conocidos son los pequeños anfibios y reptiles que, si todo va bien, se dejarán ver en nuestra excursión al lugar.
Otra de las razones atractivas para visitar los saltos de Jima es la observación de aves. Pericos, pájaros bobos y barrancolís viven en las copas de los árboles que rodean a los saltos de Jima.
Visitar los saltos de Jima es una aventura de excursionismo que merece la pena realizar en la República Dominicana. Para ello, no puedes olvidarte de ciertos objetos:
Por último, no te olvides de dejar este lugar de tanta belleza como lo encontraste, o incluso mejor. No querrás que la próxima persona que vaya a visitar los saltos de Jima encuentre basura tirada cerca de este lugar de biodiversidad única.
Los saltos de Jima tienen su localización en la provincia de Monseñor Nouel, en el centro de la República Dominicana. Más exactamente, este Monumento Natural tiene su ubicación al norte de la ciudad de Bonao.
Llegar hasta allí no es fácil por cuenta propia, por lo que te recomendamos acudir a un servicio de transporte privado en Punta Cana para hacer el tour.
Esperamos que en tu próximo viaje a República Dominicana quieras visitar este hermoso lugar.