La provincia de Monseñor Nouel esconde uno de los rincones más impresionantes que ha dado la naturaleza. Una de las cascadas más maravillosas que hay en el mundo, en la que el agua cristalina de un río natural se deja caer sobre las rocas desde una altura de 50 metros. De hecho, el Salto del Rodeo es la segunda catarata más alta de República Dominicana, y es uno de los principales atractivos de la zona.
Quienes han visitado este lugar lo definen como un lugar mágico, donde para que no existe el tiempo. Para llegar hasta el salto hay que caminar un poco, pero el camino es fácil de hacer. Además, el entorno invita a pararse en cada paso, con una vegetación extraordinaria que cubre el bosque junto a majestuosos árboles desde los que se escucha el sonido de las aves que habitan en el lugar.
Al final del recorrido, el chorro de agua impresiona por su belleza, mostrando un tesoro oculto en el que se puede disfrutar de un baño en la charca o continuar la aventura subiendo por una ruta de senderismo que es algo exigente, pero que muchos turistas deciden hacer para observar el espectáculo desde otra perspectiva.
Para llegar al Salto del Rodeo hay que cruzar Boano, uno de los pueblos más antiguos de República Dominicana al que se le llama la Villa de las Hortensias porque estas flores abundan por la zona.
La aventura continúa siguiendo el camino hasta la Loma de Blanco, donde el salto de agua se abre camino como si alguien lo hubiera colocado allí a propósito. La flora tropical y el clima hacen de este lugar una visita imprescindible para los amantes del ecoturismo, y la facilidad para llegar lo convierten además en una aventura perfecta para quienes viajan en familia, porque incluso los niños pueden explorar el entorno con su mochila a la espalda.
Lo cierto es que todo el entorno del río Blanco está considerado como uno de los mejores atractivos turísticos de naturaleza que hay en Monseñor Nouel. Y no es para menos, porque toda esta zona es famosa por ofrecer rutas de senderismo y caminos de montaña rodeados de paisajes fascinantes.
Tanto los aficionados al turismo de naturaleza como quienes buscan un lugar donde tomar el sol y disfrutar del clima tropical, tienen en el Salto del Rodeo un lugar idílico para visitar.
En definitiva, tanto por su fácil acceso como por su extraordinaria belleza natural, el Salto del Rodeo es uno de los rincones que no se pueden dejar de visitar cuando vengas a pasar unos días en República Dominicana. Además, el clima tropical invita a darse un baño y sentir más de cerca aún la majestuosidad de este chorro de agua.
Si te ha llamado la atención y quieres organizar una visita a este tesoro natural, presta atención a algunas recomendaciones prácticas para visitar el Salto del Rodeo:
Para que puedas ver dónde se encuentra la ubicación del Salto del Rodeo, echa un vistazo a este mapa de localización. Puedes utilizar nuestro servicio de transporte para desplazarte hasta Boano, y desde allí seguir el camino que dirige hasta el salto de agua de 50 metros del que te hemos hablado en esta ocasión.
Una vez que llegues hasta allí, podrás decidir si te das un agradable baño o si continúas con la aventura para llegar hasta la parte alta desde la que se precipita el río. Eso sí, es importante destacar que este tramo es un camino complicado, que no está al alcance de todo el mundo, porque en varias ocasiones necesitarás sujetarte a alguna rama para seguir subiendo. Pero cuando llegues arriba te darás cuenta de que el esfuerzo habrá merecido la pena.